Esperaba que hoy, sexto aniversario de la masacre de las torres gemelas, en este Congreso se recordara el día. Sin embargo, ni un solo comentario de ponentes ni del público. Sudáfrica es un país que mira al futuro con esperanza y no puede permitirse anclarse en el pasado.
La jornada de hoy la ha abierto Peter van Jaarsveeld, un orador con un extraordinario sentido del humor. Nos ha hablado sobre IE y salud. La secuencia es clara: la Inteligencia Emocional influye en nuestro modo de ver la vida, éste en nuestra felicidad, en nuestro bienestar y en nuestra salud. Entre el 74% y el 90% de los problemas de salud están relacionados con el estrés, cuando hace una década era el 63%. Para remediarlo, el sentido del humor es uno de los mejores remedios.
A continuación, cuatro expertas (el talento femenino se impone): la estadounidense Deborah Monroe, que nos ha hablado de cómo elevar nuestras capacidades como coaches a través de la escucha atenta, las preguntas profundas, el reconocmiento de pautas y la empatía; la Dra. Rina de Klerk, autora de más de 300 artículos, que ha tratado la consiciencia y el control emocional a través de la respiración, tiempo para uno mismo y otras actividades; y dos de las mejores ponentes del Congreso, Stephanie Vermeulen, que ha expuesto la Economía Emocional, en el que las relaciones son la nueva divisa y la argentina afincada en Australia Silvia Damiano, que ha presentado un excelente juego para conocer las emociones, saber gestionarlas y mejorar las relaciones.
Por la noche hemos tenido la cena de gala en un restaurante típico africano. La comida ha sido deliciosa, nos han pintado la cara como guerreros y hemos bailado al ritmo de los tambores. Inolvidable. Como dijo Steve Biko, asesinado en este país mañana hará 30 años (y hoy nos recordaba Stephanie): "Creemos que a largo plazo la contribución de África al mundo será en el campo de las relaciones personales. Los grandes poderes mundiales pueden haber creado maravillas en lo industrial y lo militar, pero el gran don ha de venir de África: dar al mundo un rostro más humano".