Viernes y sábado
en Barcelona. Esta mañana, en una reunión comercial (propuesta de Desarrollo
del Liderazgo) con el equipo de RR HH de una de las grandes multinacionales
europeas, líder en su sector. Y con APD Zona Mediterránea, para preparar las
próximas jornadas. Y por la tarde y mañana, Liderazgo efectivo en el
Programa de Coaching en el entorno laboral de la Universitat de Barcelona.
It’s complicated.
Lo complicado es lo difícil de resolver; lo complejo, aquello en lo que figuran
muchas variables. Algo puede ser simple y complicado, o complejo y fácil (de
solucionar).
Ayer, en La
Contra de La Vanguardia, Lluis Amiguet entrevistaba al politólogo Yannis
Karagiannis. Me gusta empezar este diario por la contraportada, porque estas
entrevista de Lluis, de Víctor Amela y de Ima Sanchís suelen ser fabulosas.
Tenemos la suerte de que ahora se han publicado sendos libros con las mejores.
El Dr.
Karagiannis, nacido en Tesalónica hace 38 años, forma parte del Institut
Barcelona de Estudis Internacionals. Es, “como muchos griegos”, practicante
pero no creyente. Casado con una catalana, tiene tres hijos. Y nos ha ofrecido
la que en mi modesta opinión es la mejor explicación del por qué y cómo de la
crisis griega.
- Veintiún diputados nazis en Grecia: ¿qué está pasando?
- Los nazis de Amanecer Dorado existen desde
los años ochenta, pero nunca habían conseguido más del 0,40% de los votos. Ni
siquiera en las elecciones europeas.
- ¿Por qué han llegado al 7%?
- Los nazis empezaron a aumentar en estimación de
voto justo cuando la canciller Merkel empezó a humillar a Grecia. Y su número
se dispara cuando Alemania propicia la expulsión de Papandreu después de llamar
"mentirosos" a los griegos.
- ¿Es un voto de orgullo nacional herido?
- Y de rabia. Los poderosos dirigentes occidentales
deberían haber aprendido de su experiencia con el mundo musulmán que
comentarios para ellos banales pueden resultar incendiarios en países
humillados.
- Pero los griegos mintieron.
- Algunos dirigentes griegos mintieron, es cierto,
con la ayuda de Goldman Sachs, pero veamos por qué...
- Adelante.
- Grecia entra en el euro en el 2001, porque Gran
Bretaña y los países escandinavos se habían negado antes a formar parte de la
eurozona y Frankfurt necesitaba sustituirlos para ganar masa crítica frente al
dólar.
- Y supongo que Atenas, encantada.
- Fue un regalo inesperado. De repente, los tipos
de interés altísimos que pagábamos por cualquier crédito en dracmas se
redujeron a la mitad. Y los bancos daban crédito a cualquiera para comprar
cualquier cosa.
- Aquí igual, porque Alemania, en crisis entonces,
necesitaba dinero barato.
- Para los griegos fue un festival y para el euro,
un inmenso error. El gobierno griego prometió encantado que, a cambio del euro,
iba a cumplir los requisitos de Maastricht.
- Por aquel entonces, tampoco Alemania ni Francia podían cumplirlos.
- Grecia prometía, pero todos sabíamos -y sabían-
que mentía. En realidad, los euros corrían por Atenas convertidos en Audis y
BMW y nadie sabía dónde acababan.
- ¿No tenían un mínimo sistema fiscal?
- Ni siquiera tenemos aún un catastro fiable,
porque la independencia de los turcos en 1821 consagró el principio de que la
tierra griega era del pueblo, lo que en la práctica acarrea una constante
inseguridad jurídica.
- ¿Cómo cobran impuestos, entonces?
- Cuanta más inseguridad jurídica, más corrupción:
con el bakshis (mordida), heredado del imperio otomano, conseguías cualquier
permiso de construcción en cualquier sitio. Los partidos se nutrían de ellos.
- Pero ¿quién pagaba impuestos?
- Hubo descontrol hasta el 2007, en que entra
Papandreu y descubre el enorme agujero griego y las mentiras, asesoradas por
Goldman Sachs, en las cuentas públicas.
- Tiró de la manta.
- Y se produce el escándalo internacional:
Papandreu comienza las reformas.
- ¿Demasiado poco y demasiado tarde?
- Era un buen principio, pero en vez de apoyarle,
París y Berlín, Merkozy, quieren aprovechar para dárselas de "duros"
frente a los "vagos y mentirosos" griegos ante sus electores y por
eso aprietan a través de la troika (Comunidad Europea; Banco Central Europeo y
Fondo Monetario Internacional) a Papandreu, que suplica tiempo y apoyo.
- ¡Ay, que me suena la canción!
- España no es Grecia, desde luego, es mucho más
sólida y solvente, pero el eje franco-alemán le está dando el mismo
tratamiento.
- Imposible de cumplir.
- En esos plazos y con esos tipos de interés, del
todo imposible. Hasta que fuerzan a Papandreu (Sarkozy le llama directamente
"idiota" en la cumbre de Cannes) a dimitir.
- Y la troika impone un tecnócrata.
- Venizelos, pero tampoco se le permite margen ni
tiempo más que para constatar la catástrofe, mientras -un día sí y otro
también- se sigue humillando a los griegos.
- Con un resultado frustrante.
Hasta estas elecciones todos esperábamos que el
Pasok y los conservadores de Nueva Democracia, partidarios de cumplir la receta
europea, ganaran y formaran una coalición, pero al final no suman para
gobernar.
- ¿Y ahora qué?
- La izquierda Syriza y Nueva Democracia intentan
aprovechar la confusión para dar el golpe de gracia al moribundo Pasok, eje de
la política griega durante treinta años.
- Con cierto nivel de corrupción.
- Tanto Andreas Papandreu, fundador del partido,
como su segundo, y ahora su tercero, Tzohatzopoulos, han sido juzgados por
soborno. La única buena noticia es que en este último proceso..., ¡por fin!,
los jueces no han tenido miedo y le han condenado.
- Es otro buen principio.
- Pero la UE y Merkel no han sabido ver que iba a
ser difícil encontrar repuesto para dos políticos sólidos como Yorgos Papandreu
y Evangelos Venizelos. Y los han machacado sin piedad para cortejar el aplauso
de la prensa sensacionalista alemana.
- Pues parece que se les ha ido la mano.
- ¿Y ahora qué? ¿Acabarán pactando con los nazis?
Hay una regla de oro en política: el mejor castigo nunca es la aniquilación del
enemigo, y Merkel, alemana, que sufrió la humillación de la Primera Guerra
Mundial, que llevó a la segunda, debería recordarlo.
- ¿Tiene Grecia consejos que darnos?
- España tiene algo que envidiamos:
¡multinacionales! Mantengan sus multinacionales, porque es lo único que los
salvará cuando la economía nacional se hunda.
Cuando las barbas de tu vecino (griego) veas pelar, pon las tuyas a
remojar. Multinacionales españolas: en banca y seguros, alimentación, energía,
industria, telecomunicaciones, turismo… Parece que son clave en esta nueva era. Hemos de tenerlo en cuenta.
Mi agradecimiento a los responsables de la gestión del talento de esas
multinacionales que han sido valientes y han apostado por el desarrollo de sus
profesionales. La mayoría, desgraciadamente, han caído en la complacencia de
‘vendernos la moto’ y no han apostado realmente por la atracción y fidelización
del talento, por la eficiencia a través del orgullo de pertenencia, por el
fomento del compromiso a partir de la comunicación de la estrategia (un
proyecto ilusionante) y de una compensación involucradora, de una cultura y
clima ganadora y de la excelencia a través de compartir las mejores prácticas.
Es complicado, pero no complejo; por eso hay ganadores y perdedores.